Los estudios de caso de Organizaciones Teal pioneras investigadas por Frederic Laloux revelaron tres avances mayores:
Organizaciones teal han encontrado la llave para operar efectivamente, aún a gran escala, con un sistema basado en relaciones entre pares (peer relationships), sin necesidad ni de jerarquía o de consenso.
Organizaciones siempre han sido lugares que motivan a la gente de poner al descubierto un “ser uno mismo/una misma” profesional reducido y de dejar otras partes de su ser en la puerta de la organización. Muchas veces requieren de nosotros(as) de mostrar una resolución masculina, desplegar determinación y fuerza y de esconder dudas y vulnerabilidad. La racionalidad gobierna como un rey, mientras las partes emocionales, intuitivas y espirituales de nosotros mismos(as) muchas veces se sienten inoportunos, fuera de lugar.
Organizaciones teal han desarrollado un conjunto consistente de prácticas que nos invitan a recuperar nuestra integridad interna y de traer todo lo que somos al trabajo.
Organizaciones teal son vistas como teniendo una vida y un sentido de dirección propios.
En lugar de tratar de predecir y de controlar el futuro, las y los miembros de la organizaciones son invitados a escuchar y comprender en lo que una organización quiere convertirse, a qué propósito quiere servir.
Cada uno de estos avances manifiesta se manifiesta a si mismo a través de una cantidad de prácticas concretas y cotidianas que se apartan – a veces sutilmente, a veces de manera radical – de los métodos tradicionalmente aceptados de gerencia.
A continuación describiremos las normas culturales y prácticas correspondientes a cada uno.