Otro tipo de conflicto se conoce como el conflicto de roles.
En el caso de conflictos de roles más bien nos encontramos con diferentes expectativas que se basan en una función que asumimos.
Por ejemplo, puede ser que un jefe debe asumir un rol de mediador en un conflicto entre dos integrantes de su área, es decir, que debería asumir un rol neutral y justo. A la vez es también el superior y debe asumir una posición en relación al comportamiento inadecuado de uno de los colaboradores.
Debido a estos diferentes roles, como mediador y superior, entra a un conflicto que vive como conflicto interno que a su vez está relacionado con las estructuras de la organización y con los roles que ésta ha establecido.
El productor que necesita incrementar la producción de alimentos tiene un rol de proveedor de su familia, a la vez es integrante del Comité de Agua Potable y Saneamiento.
Aún así, es importante darse cuenta aquí sobre donde está el origen del conflicto, que es en el nivel estructural expandiéndose luego a todos los demás niveles.
A veces también tenemos conflictos internos en relación a los diferentes roles que asumimos: pareja, madre, hija, amiga, profesional…. O sobre nuestros diferentes roles que jugamos en la comunidad.
Para comprender mejor el campo de tensión entre estos diferentes roles, les recomendamos usar la siguiente herramienta de configuración de un conflicto.